Trénel

Más de 80 años lleva la casa Trénel trabajando las uvas Gamay y Chardonnay en la zona del sur de Borgoña y norte del Ródano, construyendo generación tras generación el gusto por lo auténtico.

Esta ha sido la filosofía que ha permanecido en la casa desde su nacimiento, como una búsqueda constante que ha marcado el rumbo de Maison Trénel.

Con el tiempo Trénel se convirtió en una referencia local. El testigo de Henri Claudius lo tomó su mano derecha Henri de Boissieu y su sobrino Bruno Chambe, que asumió la dirección técnica. Hasta que a mediados de la década de 2000, Gilles Meimoun reemplazó a Henri de Boissieu.

El paso de los años y la consolidación de la casa, llevó al afamado elaborador del Ródano Michel Chapoutier a interesarse por ella. En 2015, Chapoutier adquirió Trénel tras un flechazo con sus vinos, su tradición y su filosofía de elaboración con mimo y respeto hacia el viñedo.