El vermut: la rutina sagrada del domingo

|Categoría

Recuerdo perfectamente la primera vez que probé el vermut. Fue en un bar cerca de casa de mis padres donde solían tomar el aperitivo los domingos. Entre las cañas típicas, mi padre pidió algo que yo no había visto en mi vida y quise probarlo. Solo llegué a mojar los labios y el regusto entre dulce y amargo no conquistó en absoluto las papilas gustativas de mi yo de entonces. Me supo a viejo y lo asociaba a bebida de padres y a gente entrada en la cincuentena con temas de conversación que en aquel momento yo ni entendía ni mucho menos me interesaban.

La imagen tiene un atributo ALT vacío; su nombre de archivo es bot-martinez-lacuesta-369x585.jpg

No sería hasta algunos años más tarde cuando empezaría a aficionarme a esa deliciosa mezcla de vino, ajenjo y otras especias maceradas acompañada de aceitunas rellenas y que marida a la perfección con unos boquerones en vinagre o unas patatas fritas de churrería. Desde entonces, y para siempre, este trago sagrado reina mis domingos y por qué no, algún que otro día más de la semana.  

Probablemente, uno de los primeros vermuts a los que aficionarse sea cualquiera de Martínez Lacuesta, que elaboran esta bebida desde 1937 de forma artesanal. Además, su vermut Martínez Lacuesta Reserva se encuentra entre los más y mejor valorados de Bodeboca. ¡Disfrute asegurado!

Tampoco puede faltar en tu casa el vermut gallego St. Petroni blanco. Elaborado en una vermutería situada en Padrón (La Coruña) con uvas Albariño de excelente calidad y 28 hierbas y botánicos anclados en la tradición de la zona, donde sobre todo destaca el ajenjo, las hoja de laurel, la hierba luisa, la menta, las flores de hibisco, las manzanillas e incluso los pimientos de padrón. 

Otro que, sin duda, siempre es un acierto es el vermut rojo de Lustau. Arte puro y tradición jerezana en este vermut elaborado a partir de Amontillado y Pedro Ximénez y aromatizado con frutas y botánicos como el ajenjo, la salvia o la corteza de naranja. 

Estamos convencidos de que más pronto que tarde volveremos a los bares, pero mientras tanto te animamos a hacer vinollamadas con los tuyos sirviéndote de nuestra colección La Hora del Aperitivo: una selección de conservas y vermuts a la altura de esta experiencia dominguera incluso durante el confinamiento. Esperamos que de alguna manera te acerquemos un poquito más a tu bar favorito y a tus seres queridos.