Los supertoscanos

En la Italia de los años 70 surge una nueva categoría de vinos elaborados fuera de las estrictas regulaciones de las DOC/DOCG. Convertidos rápidamente en vinos de culto, sacudieron la industria y dieron lugar a profundos cambios en las normas y en la forma de elaborar y vender los vinos italianos.

La historia empezó cuando en 1940 el marqués Niccolò Antinori elaboró para su tío, el marqués Mario Incisa della Rochetta, un tinto toscano con Cabernet sauvignon y Cabernet franc con cepas del viñedo de Château Lafite-Rotchshild, el Sassicaia. Este vino se consumió de forma privada hasta 1967 hasta que tres años después Antinori repite receta con su Tignanello, uno de los primeros vinos en Chianti que ignoró la normativa mezclando la Sangiovese con la Cabernet sauvignon.

Rebajado a la categoría “vino di tavola” – nuestro vino de mesa – el Tignanello llegó a superar en precio y en valoraciones a algunos de los Chianti más reconocidos. Otros productores de la región siguieron el ejemplo y los Supertoscanos se afianzaron como una marca de alta calidad conocida y reconocida en todo el mundo. Nacía así uno de los fenómenos del vino italiano.