El Reventón

El paisaje del valle del Alberche, sus suelos y los distintos perfiles de la Garnacha del lugar, junto al encuentro y amistad con Daniel Landi (Comando G), convencieron a Vigil del extraordinario potencial de la zona. Este hizo lo propio con  Adrianna Catena, su socia en El Enemigo, y comenzaron la búsqueda de un lugar especial que pudiera ser el epicentro de su futuro pequeño proyecto. A éste también se uniría Gearóid Lane, gran amante del vino y experto en energía renovable, como responsable de la construcción de la bodega. 

La aventura fue ardua, pero no desesperaron. Finalmente, Landi les propuso El Reventón, un viejo viñedo plantado entre 1943 y 1945 y recuperado por él mismo, ubicado en lo alto de una empinada ladera de pizarra y cuarzo, a 950 metros sobre el nivel del mar. A este se sumarían a continuación La Reina, parcela de siete hectáreas en San Juan de la Nava, y otra antigua viña en las laderas de San Gregorio, en su día también propiedad de su familia. 

Nacía así la bodega El Reventón, una aventura apasionante, arraigada en el amor por estas tierras abulenses y el convencimiento, como sus impulsores sostienen, de “puede ser la única región cálida donde, gracias a su altitud, suelos bien drenantes y antiguas viñas de Garnacha, podemos elaborar vinos con un perfil comparable al de Borgoña”.

En la actualidad, la bodega cuenta con 12 hectáreas de viñedos viejos en altitud repartidos en seis pequeñas parcelas, todas situadas a unos 15 kilómetros de sus instalaciones. 2022 fue la primera añada del proyecto que vio la luz guiada por una filosofía de viticultura y elaboración completamente orgánica y mínimamente intervencionista buscando la autenticidad de la zona y de la Garnacha en su máxima expresión.