Bellini: el cóctel veneciano que nunca pasa de moda
Una mezcla de puré de melocotón y espumoso brut: estos son los elementos clave para preparar esta sencilla, fragante y elegante receta.
El Bellini es un cóctel original de Venecia que se creó en 1948 para disfrutarlo durante el aperitivo por su facilidad de trago y su frescura. Una receta sencilla pero ingeniosa debido a las cualidades del espumoso, que le aportan estructura, mineralidad y frescor, y que se complementan con el aroma tan perfumado de los melocotones.
Su nombre se originó con motivo de una exposición de pintura dedicada al artista veneciano Giovan Battista Bellini en el Palacio Ducal hace ya 75 años. Un evento importante donde se encargó a Giuseppe Cipriani, fundador de Harry’s Bar en Venecia, crear una bebida especial para la ocasión. Para elaborarla, Cipriani se inspiró en los tonos rosados violáceos característicos del pintor, por lo que pensó en mezclar zumo de melocotón fresco con prosecco, un espumoso típico de la zona, inventando un cóctel al que llamó Bellini, en honor a la exposición.
A partir de entonces, este cóctel se convirtió en el predecesor de muchos otros en los que se utiliza vino espumoso y fruta fresca.
Ingredientes:
- 50 ml melocotones muy dulces de temporada triturados o puré de melocotón.
- 100 ml de prosecco.
Elaboración:
- Se pueden usar melocotones maduros o puré de melocotón.
- Triturar los melocotones hasta que quede un puré suave y homogéneo.
- Añadir el espumoso bien frío, aproximadamente 100 ml.
- Incorporar 50 ml de puré de melocotón.
- Servir frío, sin hielo.
