Triay

Aunque sus comienzos datan de 1840, fue a principios del siglo XX cuando esta casa empezó a tener éxito gracias al hermano de Purificación Méndez, que era arcipreste de la familia real, que hizo llegar los vinos a Alfonso XIII. Hoy en día, siguen consolidando este éxito apoyándose en la tradición que llevan en la sangre.

Isaac García y su mujer Obdulia fueron los encargados de no dejar que la calidad de sus vinos decayera, y ampliaron considerablemente la viña y capacidad de producción centrándose siempre en lo realmente importante: el cultivo. 

Siempre han cuidado todos los detalles y procesos, de manera que cuando Purificación García, hija del matrimonio, se hizo con las riendas de la bodega familiar en 2004 junto con su marido, Antonio Triay, no tuvieron más que continuar con el rico legado que habían heredado.

Hoy en día, Bodegas Triay cuenta con 7 hectáreas de viñedo, una nueva bodega dotada de la más alta tecnología y capacidad para producir 40.000 litros de vino, pero siguen teniendo su foco en elaborar vinos de alta calidad y producción limitada. 

Todo ello manteniendo los trabajos en la viña de la forma más artesanal y manual posible, ayudados únicamente de caballos cuando se requiera, y elaborando exclusivamente dos vinos: Triay Godello y Triay Mencía.