Salsas y Especias Sierra Nevada

Tras probar el tabasco por primera vez durante la mili, Carlos comenzó a testar en su propio paladar los diferentes tipos de pimientos existentes y los diferentes niveles de capsaicina que podía soportar. Su enorme conocimiento en la materia y su pasión ha hecho que sea conocido como Doctor Salsa entre sus allegados.

Sus barbacoas de pollo picante eran muy populares entre sus amigos. Un buen día, junto a su amigo Joe, decidieron crear su propia fábrica de salsas picantes y aderezos. Su popularidad creció y, años más tarde, Carlos vendió su pequeño negocio a una empresa mayor. Durante años se dedicó a importar aceite de oliva español a Estados Unidos e incluso pasó una temporada en México, donde creó un secadero de frutas naturales. Su estancia en este país también le permitió probar y experimentar con el picante.

En 2013 Doctor Salsa decide volver a su Granada natal y, sabedor de la magnífica agricultura que se podía desarrollar en las laderas de Sierra Nevada, se lanzó a la piscina con un objetivo: traer a España la revolución del picante que ya se vive al otro lado del Atlántico desde hace más de 30 años.

En una pequeña fábrica de apenas 80 metros cuadrados elabora sus salsas junto a otros dos trabajadores. Su producción es limitadísima y para ello emplea exclusivamente productos naturales, frutas de la Costa Tropical y pimientos que él mismo cultiva para garantizar su pureza.