Philippe Gonet

Apegados a sus raíces, quieren mantener viva la filosofía familiar y perpetuar la tradición, aportando al mismo tiempo un toque de modernidad a sus creaciones más recientes.

Él, licenciado en enología y viticultura, se encarga de la elaboración de los vinos, vinos precisos, delicados y de terruño. Ella, tras pasar por la Escuela Politécnica Femenina, viaja por el mundo para comercializarlos. Hoy en día, los hermanos cuentan con un hermoso patrimonio de 20 hectáreas de viñas que crecen con una agricultura responsable y sostenible y que les permite producir 200.000 botellas al año.

De todas sus parcelas, la más preciada es sin duda la de Mesnil-sur-Oger, 4,5 hectáreas de Chardonnay, la variedad de uva emblemática de este mítico terruño clasificado como Grand Cru. Ahí, en la Côte des Blancs, el mar, presente hace 100 millones de años, ha dejado la milagrosa tiza que hidrata y nutre las viñas. Las increíbles propiedades de este suelo confieren notas salinas y yodadas a los Grand Crus de la zona.