Noelia Bebelia

Sin viñas, sin cubas y con poco dinero, pero sí unas increíbles ganas de sacar su proyecto adelante. Se pusieron manos a la obra, estudiando las mejores parcelas de Soutomaior para plantar cepas de albariño. Finalmente se decantaron por una finca de 3 hectáreas y orientación sur, en la montañosa ladera del río Verdugo

En ella plantaron 6.000 cepas de Albariño, consiguiendo, al segundo año, elaborar su blanco. Para ello necesitaron cosechar uvas de extrema calidad y contar con la ayuda de los mejores especialistas accesibles. Formaron un equipo de enólogos, en el que estuvieron involucrados, incluso, investigadores del CSIC. Contaron, además, con Jesús Pita Sors, toda una autoridad en el ámbito de la investigación de la Albariño, para el diseño de la finca.

Su misión es elaborar vinos extraordinarios de reconocimiento internacional, elaborados exclusivamente con uvas procedentes de su finca. Sin olvidar la sostenibilidad, aplicando las mejores prácticas sostenibles en el viñedo y la bodega para reducir el impacto del ser humano en el medio ambiente y la sociedad. Además, se emplean prácticas sostenibles y productos ecológicos, siempre que sea posible, en la elaboración y distribución de sus vinos.