Perrier-Jouët Ecobox: el placer responsable de un ‘champagne’ icónico
La grandeza de las casas históricas también se mide por su capacidad de saber adaptarse a los tiempos sin perder la esencia que las elevó a la cima. La Maison Perrier-Jouët da perfecto ejemplo de ello con el flamante lanzamiento de su nueva presentación Ecobox, la atractiva caja ecológica, que desde ahora albergará a sus champagnes clásicos no vintage Perrier-Jouët Grand Brut, Perrier-Jouët Blason Rosé y Perrier-Jouët Blanc de Blancs.
Diseño y sostenibilidad, belleza y compromiso medioambiental se aúnan en la Ecobox, culminando dos años de investigación y desarrollo. El resultado es una caja totalmente reciclable, fabricada en Francia a partir de fibras 100% naturales, provenientes de bosques certificados FSC, en la que la tinta de su impresión y el pegamento empleados tampoco contienen aceites minerales y cuyo peso, además, se ha reducido en casi un 30% respecto a la anterior.
Durante sus más de dos siglos de historia, la naturaleza ha centrado la atención y ha sido constante fuente de inspiración de la maison, fundada en 1811 en Epernay por el matrimonio formado por Pierre-Nicolas Perrier y Rose-Adélaïde Jouët. Y es que como, apunta Séverine Gomez-Frerson, su actual Chef de Caves, el propio fundador, entusiasta botánico y experto en viticultura, cultivó desde el principio una relación de simbiosis con la naturaleza. De esa unión y de su espíritu libre, audaz e independiente, surgieron sus champagnes de complejo y singular estilo floral e iniciativas como su nueva Ecobox no hacen sino continuar y reforzar la filosofía que ha hecho única a la casa.
En la misma línea de las ‘ecoboxes’ de Perrier-Jouët Grand Brut, Perrier-Jouët Blason Rosé y Perrier-Jouët Blanc de Blancs figura la promoción de la viticultura sostenible en la totalidad de las 65 hectáreas de viñedo de la maison, hoy en día uno de los más admirados de Champagne y calificado en el 99,2% dentro de la clasificación de calidad Echelle des Crus. Estas excepcionales parcelas, ubicadas en localidades míticas de Cramant y Avize (Côte des Blancs), Mailly (Montagne de Reims) y Aÿ y Dizy (Vallée de la Marne), son cultivadas sin herbicidas, con abonos verdes y métodos de biocontrol.
En bodega, el 100% de los subproductos del proceso de elaboración de los champagnes de Perrier-Jouët, como las lías, también se recicla para su procesamiento y conversión posterior en compost o aceites esenciales. El cierre perfecto a un círculo de responsabilidad y concienciación al que el público ya puede sumarse con Perrier-Jouët Grand Brut, Perrier-Jouët Blason Rosé y Perrier-Jouët Blanc de Blancs y su nueva Ecobox, la minimalista y elegante caja eco-friendly ideal, además, para regalar.
