Bodegas Enguera

La historia de esta bodega se remonta a 1974, cuando don Pedro Pérez Pardo adquiere las fincas de Antolí y El Chalet del Río, en Enguera; y las fincas de 65 hectáreas de viñas, Casa Lluch y Casa Corones en Fontanars dels Alforins. Pero no es hasta 1999, cuando construye la actual bodega en el término municipal de Enguera. 

En 2002 el yerno de don Pedro, Juan Iglesias Jiménez, entra a dirigir la empresa y, gracias a la pasión y entusiasmo que comparte con su mujer María Cruz Pérez Herrero, consiguen posicionar a Bodegas Enguera entre las grandes bodegas valencianas. En el mismo año, adquieren la finca de 20 hectáreas de Casa Toñuna, donde plantan nuevos viñedos y se enfocan en una viticultura más respetuosa con el medio ambiente. 

En 2011 don Pedro Pérez Pardo fallece dejando su legado a sus nietos, Juan Ramón, Pedro y Silver, que ya formaban la tercera generación de la bodega. Este mismo año, obtienen las certificación de agricultura ecológica en todas las parcelas.

En 2013 Juan Ramón se convierte en el gerente de la bodega involucrándose activamente en el diseño y comercialización de los vinos. Mientras que Pedro dedica todos sus esfuerzos a dinamizar el enoturismo y participar en ferias internacionales. 

La tercera generación es cada vez más sensible a que la empresa contribuya a la mejora y cuidado del medio ambiente. Por eso, en 2014 crean Enguera Planet, un centro de investigación enfocado a mejorar la sostenibilidad ambiental de la bodega, gracias al cual han puesto en marcha varios proyectos de agricultura ecológica.

Entre todos ellos, en 2015 lanzan un plan de conservación para recuperar el hábitat natural del murciélago, instalando cajas refugio en los viñedos para demostrar su capacidad para controlar la plaga de la polilla del racimo. De hecho, su reconocida gama Aliats, un tinto y un blanco modernos, fue creada en homenaje a estos maravillosos aliados sostenibles.