Domaine Olivier Merlin

Tanto uno como otra son dos expertos viticultores que siempre creyeron en el potencial de su terruño en Mâconnais. La primera experiencia de Olivier Merlin en el mundo del vino fue en la vendimia de 1977. Fue el punto de partida de su historia. 

Estudió en la escuela de Beaune y pasó dos años trabajando en la cooperativa vinícola del Jura. Allí se encontró con la que sería su futura esposa, Corinne.

Años más tarde, en 1985 viajó a California para transformar en vino la vendimia de un viñedo en Napa, antes de volver a su lugar de origen y hacerse cargo de sus cuatro hectáreas y media de viñedos que habían estado en manos de la misma familia desde 1750.

Dos años después, en 1987, la pareja decidió hacerse cargo de esas tierras y alquilar los viñedos a un señor que deseaba retirarse.

Desde entonces, con el paso de los años, Olivier y su mujer se han ganado la reputación de uno de los elaboradores más dinámicos de la región, una referencia en Mâconnais, a pesar de sus vinificaciones pequeñas.