Bodegas Arfe

Palo Cortado de Autor

Arfe son los apellidos de Luis Arroyo Felices. El que fuera Director Técnico del Grupo Garvey, soñaba con tener una pequeña bodega para cuando se jubilara pero un día decidió adelantarlo y hacerlo realidad en vez de sueño.

En diciembre de 2015 embotelló las primeras botellas de su Palo Cortado de La Cruz 1767, de la que salieron al mercado 6.000 botellas.

El proyecto empezó en el año 2000 con la búsqueda de una bodega de tamaño y condiciones apropiadas para el nacimiento de su Jerez de autor. La encontró en uno de los barrios más curiosos de Jerez, lleno de historia y arte, que además corresponde a la cota más alta de la ciudad, donde corre bien el aire de Poniente y de Levante, la calle se llama Molino de Viento.

En el pasado, las aguas del Océano Atlántico impregnaban de salitre la zona en la que se encuentra la bodega. La bodega adquirida por Luis Arroyo, además de tener esa privilegiada situación, tiene otros valores añadidos. Fue en su momento parte de la firma más antigua de Jerez, Cabeza y Zarco, y aunque oficialmente se fundó en el año 1750, en el archivo de la misma hay documentos que prueban su mayor antigüedad, remontándose a 1653.

En una de las columnas de piedra vieja, que sostiene los arcos de medio punto de la bodega de dos calles, se encuentra un escudo esculpido en la piedra y una inscripción sobre la lápida. En el escudo, una cruz sobre unas olas, la cruz del mar, y en la inscripción se lee que fue reedificada –por tanto, tenía que existir antes– en el año 1767. Esta fecha y la cruz sobre las olas, definieron el nombre de su vino: de la Cruz de 1767.

Con toda esta historia a sus espaldas, Luis Arroyo decidió empezar de cero en su bodega. Optó por elaborar un auténtico vino de autor desde el principio. Seleccionó los mejores mostos, todos de la cosecha del año 2000, de una cooperativa de Chipiona, en viñedos con exposición al mar. En realidad eran vinos sobretablas ya encabezados a 18º. Adquirió la cantidad necesaria para poder llenar las 216 botas. Las que compró con unos 40–50 años de media. Compró 108.000 litros. Y posteriormente, cada año selecciona y compra 3.500-4.000 litros de mostos, para rociar la segunda criadera. Luis Arroyo no vinifica ni encabeza. Solo cría y dirige los vinos hacia lo que quiere, el Palo Cortado.