Descripción

En la parcela Las Gravas, situada en las laderas de la montaña que domina la bodega, se cultiva principalmente la variedad Monastrell junto con la Garnacha. Es un vino en el que se busca un estilo muy mediterráneo. Es además, el más mineral de todos los de la bodega, y el aporte de Garnacha le otorga frescura y fluidez, haciendo que la potencia y la concentración de la zona queden acertadamente en segundo plano. Ha sido valorado por The Wine Advocate como uno de los 3 mejores vinos de esta D.O. murciana.

Ficha técnica

La bodega
Tipo
Tinto
Añada
2018
Grado
15.0% vol.
Producción
34.500 botellas
Variedad
90% Monastrell, 10% Garnacha
Otros formatos disponibles:
Origen
Jumilla

Cata

Vista
Color rojo picota de capa media-alta.
Nariz
Fruta roja madura, apuntes minerales (piedra y tiza), notas especiadas (clavo) y hoja de tabaco, todo con una buena complejidad.
Boca
Sabroso, fino, fresco y carnoso a la vez, con buen equilibrio y gran estructura. Intenso y largo.
Temperatura de servicio
Se recomienda servir a 16 ºC.
Consumo
Hasta 2030 si se conserva en óptimas condiciones.

Viñedo y elaboración

Nombre
Las Gravas.
Descripción
Laderas ubicadas en la montaña que domina la propiedad. Formación en vaso y en secano.
Superficie
22 hectares.
Edad
Viñedos plantados en 1986
Suelo
Muy pedregoso
Clima
Continental-mediterráneo.
Cosecha
Vendimia manual.
Vinificación
Fermentación tradicional de cada variedad por separado en lagares subterráneos con control de temperatura a 32 ºC.
Envejecimiento
Crianza de 18 meses en fudres de roble. El ensamblaje de las variedades se hizo después de la crianza.
Embotellado
En julio de 2020.

Opinión de los críticos

The Wine Advocate:

The 2018 Las Gravas is a blend of 90% Monastrell from limestone gravel soils and 10% Garnacha also planted in the same gravel soils, but it's obviously much younger than the Monastrell. It fermented in underground pools with 25% to 30% full clusters and indigenous yeasts and matured in 5,000-liter oak foudres and 500-liter oak barrels for 16 months. It's an incredibly elegant and delicate Las Gravas, nuanced and with a discrete profile, a little shy at first. The palate is also super elegant and balanced, with refined tannins, a velvety texture and very fine chalky minerality. The north-facing vineyard, the backbone of this wine in a challenging and cooler year, is now 40 years old and has vigor and balance, which has resulted in an incredible wine through a lot of work in the vineyard. This has to be the finest vintage to date, a real triumph over the adverse conditions of the year that transcends the quality of the vintage. They used a lower percentage of Garnacha to avoid too much florality in the blend, and the wine is more serious. It's less explosive than the 2017, but I'd say, more gravelly... Bravo! 34,500 bottles produced. It was bottled in July 2020.- Luis Gutiérrez.