Hablar de Mestres es hablar de la génesis del cava, y es que el origen de esta bodega es mucho anterior a la fundación de la propia D.O. Cava y a la elaboración de espumosos en nuestro país. [break]
La familia que está al frente de esta casa desde hace 30 generaciones posee documentos del año 1312 que ya atestiguan la vinculación de sus antepasados con el mundo del vino y con el cuidado de la viña en la comarca del Penedés.
Hasta 1925, todos los vinos elaborados por la familia Mestres y su entorno eran tranquilos. Todavía no había nacido la fiebre por las burbujas, pero aquel año, y siguiendo el método champanoise que ya comenzaba a practicarse en Francia, Josep Mestres Manobens decidió hacer una segunda fermentación al vino base tal y como hacían los franceses.
A ese primer espumoso lo llamó “champán Mestres”, ya que la utilización de esta palabra todavía no estaba restringida a los vinos elaborados en la región de Champaña. Años más tarde, concretamente en 1959, el propio Josep se convirtió en uno de los promotores de la palabra CAVA, y desde 1960 todos los vinos de la casa se comercializan bajo ese término.
El afán innovador de Josep Mestres no quedó ahí, y en 1945 se convirtió en el creador del primer cava sin adición de azúcar después del degüelle. Al no llevar nada de azúcar era un vino tremendamente seco para la época, por lo que decidió llamarlo Coquet Visol Triple Seco. Fue el primer Brut Nature de la historia, y aún hoy en día, es uno de los emblemas de la firma.
La larga tradición de los Mestres se puede comprobar dando un paseo por el casco histórico de Sant Sadurní d’Anoia, una de las grandes capitales del cava de nuestro país. Allí, en el número 8 de la Plaza del Ayuntamiento, se encuentra una casona señorial de estilo modernista que es la sede de la compañía. Un lugar que nos habla de tradición, pero sobre todo, de historia, la de una marca que es leyenda viva del vino más vinculado a todo tipo de celebraciones.
En esta Venta Privada en la que presentamos por primera vez los cavas de la familia - todos de añada - nos gustaría destacar tres de ellos, los tres con puntuaciones superiores a los 90 puntos.
Por un lado su Gran Reserva Imperial, un espumoso con una nariz mineral que en algunos momentos nos recuerda los rieslings antiguos debido a sus aromas de hidrocarburo. Por otro lado el Blue Fin Gran Reserva, con una presentación más desenfadada y dedicada al atún, el manjar que mejor armoniza con él (¡os recomendamos altamente este maridaje!). Y por último, el Clos Nostre Senyor, seguramente el más elegante de su portolio, un espumoso de finca del que apenas se elaboran 3.000 botellas y con una crianza en rima de más de 100 meses que puede presumir con todo merecimiento de sus 92 puntos Parker.
Mestres es una antigua casa de elaboradores de cava ubicada en pleno corazón de Sant Sadurní d’Anoia, concretamente en la mismísima Plaza Mayor de la localidad.