Descripción

Este vino proviene de los fondos de la bodega sanluqueña Hijos de Rainera Pérez Marín y corresponde con la saca de septiembre de 2023. La Bota de Manzanilla Pasada 120 “Botas NO” resulta de combinar la "Bota Punta" junto con las otras dos mejores botas de la solera 1/15, de donde proceden todas las ediciones de botas punta y NO de manzanilla pasada desde la número 20 de la serie.

De este modo se pueden combinar tres objetivos diferentes con esta edición número 120: a) vino excepcional; b) número de botellas razonablemente alto como para que todos los que lo deseen puedan acceder a ellas; c) mantener la tradición de que todas las ediciones acabadas en cero, desde la 10 en 2008, han sido manzanillas pasadas de Misericordia.

Ficha técnica

La bodega
Tipo
Manzanilla
Grado
16.5% vol.
Producción
3.000 botellas
Variedad
100% Palomino fino
Origen
Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda

Cata

Nariz
Elegantes notas aromáticas.
Boca
Complejo y potente, de equilibrado frescor. Notamos toques de frutos secos y un apunte incipiente de caramelo, inigualable carácter biológico de fondo (intensas y aceradas sensaciones salinas en boca).
Temperatura de servicio
Entre 7 y 10 ºC.
Consumo
Servir en copa ancha.
Maridaje
Acompaña con gran versatilidad gran variedad de platos, desde los más agradecidos (guisos y arroces marineros, cecina de vacuno) hasta los más complicados (huevos con boletus, revuelto de tagarninas, tortas de queso extremeñas).

Viñedo y elaboración

Vinificación
En el momento de su extracción, el vino de las tres botas debía de tener una vejez media estimada en torno a los 14 años. Una característica que contribuye a hacerlo único y darle un inigualable carácter biológico de fondo (intensas y aceradas sensaciones salinas en boca) es que las botas están llenas casi “a tocadedos”, muy por encima del nivel de 5/6 habitual en el Marco de Jerez. De este modo, la lámina de levaduras (muy debilitada por la edad y por la escasez de nutrientes del vino) de estas vasijas no es tan extensa y
puede mantenerse con el aporte de los escasos rocíos periódicos, cumpliendo su función de barrera entre el vino y el efecto intensamente oxidativo del aire. Por otra parte, la debilidad y la escasa superficie de la flor no alcanza a mantener un intenso efecto sobre la manzanilla, que evidencia elegantes notas oxidativas.