Tres vinos que son responsables de inocular el gusanillo del vino a personas muy alejadas de él. Un frizzante, un blanco y un rosado que enganchan a gente que nunca ha bebido vino, creando cantera. [break]
Y es que estos vinos de poco contenido alcohólico y gran frescura son ideales para beber en cualquier momento de manera desenfadada. Aportan alegría, buen rollo y desinhibición. Son forjadores de amistad.
Ahora en verano entran muy fácil bien fresquitos. Por un precio muy asequible te amenizan cualquier aperitivo, comida o reunión 'chiringuitera'. Con arroces, frituras de pescado y mariscos están realmente buenos.
Los tres vinos son perfectos para que la chavalada se acerque al vino sin complejos, alejándose del aguarrás de cualquier botellón. Siempre hay que beber con moderación, pero al menos que lo que se beba tenga calidad. Estos vinos nos la dan al mejor precio.
Y lo hacen con una imagen desenfadada, y ciertamente bonita, que llama la atención por su diseño colorista. Y encima pertenecen a una denominación muy pequeñita enclavada en Rioja, IGP Valles de Sadacia, el paraíso de los blancos de Moscatel de grano menudo, fundada gracias al empeño de José Miguel Arambarri, alma mater de Vintae, la empresa que está detrás de Maetierra.
La primera elaboración de los vinos de Maetierra se hizo en 2001, de forma experimental, en la Escuela de Enología de La Rioja.
De lunes a jueves de 09:30 a 18:30 y viernes de 09:30 a 15:30 (excepto festivos)
General: 91 198 12 37
Lu/Ju 09:30 a 18:30
Vi 09:30 a 15:30.
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