Bodegas Mauro

Mariano García creó Mauro, la bodega que toma el nombre de su padre, para poder hacer vinos con total libertad. [break]

El que se considera uno de los más reputados enólogos españoles, trabajando en míticas bodegas como Vega Sicilia o Aalto, buscó en Mauro una bodega donde poder hacer sus vinos más personales. Vinos que buscan la elegancia en cada añada y materializan su filosofía a la hora de elaborar. 

La familia García es una de las sagas más importantes y prestigiosas en el mundo del vino español. Este reconocimiento se debe en gran parte a la figura de Mariano García, pero también al buen hacer de sus hijos Alberto y Eduardo, que hoy en día ocupan la primera fila en la dirección y la gestión técnica de esta bodega ubicada en Tudela de Duero (Valladolid). 

Alberto García es actualmente el director de Mauro. Es un buen conocedor del vino no sólo por la familia en la que se ha criado, sino también por los proyectos en los que ha participado junto a su hermano en zonas como la Ribera del Duero o el Bierzo. Eduardo, por su parte, incorporado al proyecto de Mauro desde hace casi 15 años, ocupa la dirección técnica después de formarse en escuelas de viticultura y enología de prestigio en Burdeos.

La familia García, que vive el vino de forma natural, parte en la creación de sus vinos de una filosofía con una clara orientación ecológica en el cultivo de la vid y bajo un respeto máximo a la uva durante los procesos de elaboración y crianza; siempre con la finalidad de obtener  vinos de nítida expresión frutal, estructurados y longevos, con equilibrio entre fruta y madera, opulentos, elegantes y sensuales. El secreto de su éxito, según ellos mismos, tan “solo” ha contado con cuatro ingredientes básicos: pasión, ilusión, trabajo y tiempo.