Bodegas Hiriart

Los túneles y galerías con los que cuenta esta bodega fueron excavados de forma manual en el siglo XVIII. Por aquel entonces el vino se elaboraba mediante un prensado en la viga tradicional, de la que Hiriart aún hoy conserva la piedra original y el punto de apoyo de la palanca.

Durante los siglos XIX y XX, la bodega experimentó una serie de importantes mejoras tecnológicas: se construyeron depósitos de cemento que sustituyeron a las tinas de barro y madera hasta alcanzar un total de 25 000 cántaros de 16 litros cada uno.

Dichas mejoras fueron ejecutadas por los tatarabuelos de los actuales responsables de Hiriart. Ellos eran comerciantes de lana y en uno de sus numerosos viajes a Francia entablaron amistad con familias de la región de Burdeos, de quienes aprendieron gran parte de sus conocimientos sobre el mundo del vino.

En la actualidad, la enóloga Isabel Montes-Jovellar es la encargada de dirigir los procesos de elaboración en esta bodega, que sigue fiel a sus raíces cuidando los viñedos con mimo para conseguir la mejor materia prima posible.