Cuando autenticidad, tradición e inspiración se unen
Es una de las vueltas más esperadas. Muga regresa y lo hace esta vez poniendo el acento en su alma tinta a través de tres de sus referencias más emblemáticas. Las mismas que le han llevado a ser una de nuestras bodegas más grandes. [break]
Tanto los tintos que te traemos en esta ocasión, como el blanco y los dos espumosos que le acompañan, tienen en común esa fusión de tradición, inspiración y autenticidad que Muga sabe como nadie poner en valor en todas y cada una de sus creaciones. Señas de identidad que, junto a la fiabilidad, hacen que estas siempre cuenten con el respaldo unánime de público y crítica.
Con esta guía de excelencia, y valoraciones por encima de los 93 puntos en las publicaciones y gurús más reputados, encontrarás, en dos añadas distintas (una de ellas en formato magnum), el emblema de la firma, Muga Crianza con 24 meses crianza que bien podrían ser los de un reserva; el clasicismo bien entendido y con mayúsculas de Muga Reserva Selección Especial y Torre Muga, el tinto de corte más moderno de la bodega, en su mejor añada hasta la fecha.
Fuera de los tintos, siempre resulta una compra más que inteligente hacerse también con la frescura y untuosidad de Muga Blanco y, con las próximas fiestas en el horizonte, con los cavas de la casa, Conde de Haro Brut y Conde de Haro Brut Rosé. Dos fieles exponentes de la larga tradición de espumosos riojanos que llenarán tu boca de una placentera sensación de plenitud. Prepárate para disfrutar.
Desde antiguo la familia Muga ha tenido vinculación con la viticultura. Ya en 1870, Antonio y Baltasar Muga recibieron un premio a la calidad de sus vinos del entonces Ministerio de Fomento.