El origen de la Heredad de Can Llopart data del siglo XIV. Según un documento fechado en 1385, Bernat Llopart o, como reza el documento, Bernardus Leopardi, recibió la cesión de unas viñas donde hoy se ubica la bodega. [break]
Esta es la primera referencia que se ha hallado que vincula a los Llopart y la viticultura. Esta relación ha permanecido intacta desde dicha fecha, pues actualmente continúa siendo la misma familia la encargada de la dirección de la Heredad.
La familia compaginó durante siglos el cultivo de algunas de las materias primas más mediterráneas, como son la uva, el trigo y la aceituna. No fue hasta finales del siglo XVIII cuando los Llopart decidieron dedicarse exclusivamente a la vitiicultura, tal y como ocurrió de forma generalizada en todo el Penedès.
En el año 1887 Pere Massana, por entonces propietario, empezó a etiquetar el espumoso que allí elaboraba con el nombre de la masía que tenía en Subirats: Heredad de Llopart. Así pues, comenzó a usar una etiqueta cuya ilustración continúa utilizándose hoy en día en todos sus espumosos y en la que se muestra una vista panorámica de la masía y de las montañas de su entorno.
A principios de la década de 1950 Pere Llopart Vilarós dio un giro al destino de las bodegas. Se esforzó en dar a conocer y en atribuir prestigio a los vinos espumosos artesanos, una especialización en la que esta casa ha ido haciéndose un hueco y donde ha obtenido cierto reconocimiento.