Descripción

La añada 2013 de Lagar de Cervera se caracterizó por el magnífico estado de la Albariño, uno de los mejores de los últimos años. El vino, que se presenta con una acidez ligeramente inferior que otras añadas anteriores, resulta un excelente acompañante con un buen arroz con mariscos o como aperitivo, ya que tiene suficiente volumen y frescor como para incitarnos a seguir bebiendo.

Ficha técnica

La bodega
Tipo
Blanco
Añada
2013
Grado
12.5% vol.
Subzona
O Rosal
Variedad
100% Albariño
Otros formatos disponibles:
Origen
Rías Baixas

Cata

Vista
Se muestra muy brillante de color amarillo pálido con reflejos verdosos.
Nariz
Destaca por ofrecer un aroma de gran intensidad varietal, frutas tropicales, maracuyá, frutas de hueso y cítricos, como el pomelo y la naranja, con recuerdos a hierba fresca y heno.
Boca
Se muestra fresco, carnoso y equilibrado. Su retrogusto es potente y muy persistente.
Temperatura de servicio
Entre 10ºC y 12ºC.
Consumo
Desde ahora y durante los próximos dos años.
Maridaje
Es un vino perfecto para disfrutar junto a cualquier aperitivo. Además, resulta un idóneo acompañante del marisco y del pescado, así como de ensaladas, arroces de pescado, aves, quesos frescos, etc.

Viñedo y elaboración

Nombre
Viña Cervera (Seoane y Cervera) en O Rosal.
Descripción
Viñedos emparrados, con orientación sur y suroeste.
Superficie
60 hectáreas.
Edad
25 años.
Clima
La cosecha 2013 se caracterizó por el magnífico estado sanitario de la uva Albariño, uno de los mejores de los últimos años. Para ello resultó clave la bonanza meteorológica registrada especialmente desde julio, con tiempo seco e intenso calor, que compensó los efectos de una primavera muy lluviosa.
Cosecha
Tras la selección y recolección manual, los racimos se depositaron en pequeñas cajas de 20 kg. que se transportaron a bodega en plataformas refrigeradas.
Vinificación
Las uvas, ya despalilladas, fueron cuidadosamente prensadas a 10ºC y bajo atmósfera inerte para evitar cualquier oxidación. Posteriormente el mosto fermentó a 15ºC. Debido a las características de la añada, con una acidez inferior a las precedentes, apenas un 10% de los depósitos necesitaron completar la fermentación maloláctica. Realizada la primera trasiega, el vino se maceró en sus lías finas que, mediante bazuqueos periódicos, se mantienen en suspensión aportando densidad y complejidad.