Señorío de Barahonda

Siguiendo en nuestro empeño por explorar nuevos y emocionantes descubrimientos, queremos presentaros casi por primera vez los vinos de una denominación algo desconocida para el público mayoritario al vino, pero pujante en el panorama vitivinícola actual español como es Yecla, en el nordeste de la Región de Murcia.

En esta D.O, compuesta por apenas una decena de bodegas, destaca la elaboración de los vinos de la bodega familiar Señorío de Barahonda, que ha recibido recientemente el espaldarazo de la publicación americana The Wine Advocate al otorgar a su Barrica 2011 los 92 puntos Parker. Todo un factor seguro para los que buscan una excelente relación calidad/precio. [break]

La denominación murciana de Yecla, constituida en 1972, se desarrolla en una región con una larga tradición vinícola desde tiempos de los fenicios. Esta historia se personifica en Barahonda, cuyos orígenes se remontan a mediados del siglo XIX, cuando don Pedro Candela Soriano comenzó a comercializar sus vinos en tinajas. Estos "caldos", que por aquel entonces vendía a granel, sembraron el embrión de la bodega que hoy os presentamos, donde destacan la nobleza, complejidad y unicidad de sus vinos, personificados en las variedades blancas Airén y Macabeo y la tinta Monastrell.

La zona, de transición entre la llanura manchega y el Mediterráneo, cuenta con unas condiciones climáticas muy diferentes a las del resto de la región murciana. Unas amplísimas oscilación térmicas que hacen que, aquí, la variedad Monastrell, acostumbrada a las sequías, se adapte como pez en el agua, ofreciendo vinos de alta calidad con intensidad de sabores, color y aromas de la uva.

En esta Venta Privada os presentamos tres vinos unidos a la tierra y elaborados desde la cepa, como proclama el leitmovit de Señorío de Barahonda. En primer lugar, la última añada salida al mercado de su Blanco, un vino tremendamente goloso y frutal que sorpenderá positivamente a los que todavía no se hayan adentrado en el mundo de los blancos murcianos.

En el apartado de tintos, el mencionado Barrica 2011, uno de los mejores vinos en relación calidad/precio de toda la D.O, un coupage de la variedad autóctona de la región con la foránea Syrah que ha cautivado a los más exigentes críticos internacionales. Y por último, Heredad Candela, el vino procedente de algunos de los viñedos más antiguos de la propiedad, un tinto que hace honor a don Pedro, el pionero de esta bodega. Vino amplio, potente, frutal y con una muy buena persistencia en boca que terminará por seducir a los más incrédulos.