El garnachismo es religión y Jorge Navascués, uno de sus más insignes profetas en la tierra prometida aragonesa, alumbra vinos para no dejar de profesarla. [break]
Y lo hace liderando el proyecto familiar Mas de Mancuso con el conocimiento y el convencimiento propios de quien atesora una herencia forjada por tres generaciones. En el origen de todo están sus viñas viejas plantadas en Almonacid de la Sierra, en la comarca zaragozana de Valdejalón.
La mayoría de ellas son de Garnacha, cultivadas en vaso, con exposición norte y a una altitud superior a los 600 metros sobre el nivel del mar. La frescura de la cuna y la uva se ve preservada y acentuada gracias a una elaboración arrullada por los ecos del pasado con prácticas como el pisado de los racimos enteros o la crianza en las cuevas subterráneas de su bodega que datan de 1800. El terruño y la variedad hablan hilando un discurso fluido pleno de elegancia, pureza, jugosidad y de una arrebatadora y distintiva finura floral.
Ya sea en su línea homónima más top como en Cutio, su gama más accesible y de las que más ofrecen por menos, no sólo de la denominación Cariñena sino del vino nacional, la Garnacha de Navascués es una maravilla auténtica para goce nuestro, tuyo y de la crítica especializada.
Entre sus admiradores, Luis Gutiérrez de The Wine Advocate o Beth Willard, quien nombró a Jorge enólogo del año en su informe especial Aragón 2024 Top 100 publicado por el Master of Wine Tim Atkin. En éste además deja constancia de que su talento no se limita a los tintos ni alcanza techo con la Garnacha, al elegir a Mas de Mancuso Macabeo 2020 y Cutio Macabeo 2021 como el blanco del año y el vino en su categoría con mejor relación calidad-precio, respectivamente. La fe también se revela en su fragancia, su sutileza no exenta de tensión, una justa acidez y atractiva mineralidad.
Nosotros no nos cansamos de celebrar todos sus logros y, menos aún, de disfrutarlos en nuestras copas. Ahora, creyente, tienes la oportunidad de hacerlo tú.
Los orígenes de este proyecto se remontan a 2002 con la unión de dos familias: los Navascués y los San Pedro (bodegas Pujanza) para recuperar y elaborar garnachas en Jarque del Moncayo.
Bodeboca.com © 2025 - Todos los derechos reservados