Debido al alto volumen de pedidos, las fechas de entrega pueden sufrir temporalmente algunos retrasos. Sentimos las molestias
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Cada vino descorchado esconde una historia personal, y si se trata de uno de los más vendidos de nuestra web, como Juan Gil, las historias se multiplican. [break]
Nos hemos preguntado qué es lo que lleva a muchos de nuestros socios a encontrar en Juan Gil su vino de cabecera, y para saberlo, hemos preguntado a algunos de sus compradores más fieles, como José, Pablo o Ignacio, tres socios que nos han contado por qué eligen siempre Juan Gil, contribuyendo a que este tinto de Jumilla esté entre nuestros Top Ventas.
José López Barneo es un socio de Jaén afincado en Sevilla. Nos ha contado que el vino de Jumilla forma parte de su infancia. “De niño nos regalaban en casa mucho vino de Jumilla y siempre ha estado en mi recuerdo. Hace unos 7 años, en uno de mis viajes a Estados Unidos, entré en una liquor-store y vi por primera vez el Juan Gil. El sumiller de la tienda me lo recomendó, y evocando los recuerdos de mi infancia, le di una oportunidad”. José, que tenía entonces el recuerdo del vino de Jumilla como de “vino peleón”, destaca el buen desarrollo que ha tenido en estos últimos años. “Tiene mucho mérito hacer un vino así con la relación calidad-precio tan estupenda que tiene”, nos confiesa.
Pablo Cazalis es otro de los fieles compradores de Juan Gil. Vive en Esplugues de Llobregat (Barcelona), y conoció el vino en la boda de su hija, hace aproximadamente 3 años. “El vino lo compró mi yerno exclusivamente para este evento”, nos escribe. Pablo recuerda que le gustó mucho y desde entonces no solo lo compra sino que lo recomienda. “Desde que me jubilé en 2011 comencé a hacerme una pequeña bodega, y entre todos ellos mi preferido es este vino” cuenta Pablo, quien también valora mucho la relación calidad-precio de este Juan Gil.
Por último, Ignacio Errasti, un socio de San Sebastián, reconoce que conoció este vino por nosotros. “Leímos en BODEBOCA que existían estos vinos y aunque antes bebíamos tintos de Rioja, hoy este Juan Gil es un vino que tomamos en casa a diario gracias a su buen precio”.
Con estos testimonios, queda de manifiesto que Juan Gil es un vino que engancha, un referente en las mesas de muchas familias que compran su vino con nosotros. Así pues, no es de extrañar la larga trayectoria de más de 100 años que atesora su bodega y la larga vida que todavía tiene por delante. Son muchos los momentos, las celebraciones y los brindis en los que una botella Juan Gil todavía va a estar presente, y hoy os lo volvemos a presentar con este fin.
Los orígenes de esta bodega se remontan a 1916 cuando Juan Gil Giménez, bisabuelo de quienes actualmente trabajan allí, decidió entrar en el mundo del vino.
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