Descripción

Según cuentan desde la bodega, este monovarietal es su pequeño tributo a la provincia de Alicante. El viñedo del que procede se encuentra sobre suelos de piedra caliche, una verdadera rareza, y en ellos se lleva a cabo una viticultura basada en la filosofía de "residuo cero", esto es, que en su cultivo no se ha empleado nunca herbicidas, sistémicos ni insecticidas. El resultado es un tinto vivo, expresivo y de producción limitada. Un vino ineludible para los amantes de la Monastrell y de los tintos levantinos.

Ficha técnica

La bodega
Enrique Mendoza
Tipo
Tinto
Añada
2017
Grado
14.5% vol.
Producción
3.000 botellas
Variedad
100% Monastrell
Otros formatos disponibles:
Origen
Alicante

Cata

Vista
Color rojo picota con destellos granates y capa media-alta.
Nariz
Recuerdos a hierbas mediterráneas: romero, lavanda, tomillo, esparto, pino y muchos balsámicos que aportan frescura. También destaca su gran mineralidad y profundidad, así como notas ahumadas y tabaco.
Boca
Grande y potente pero sin dejar de ser elegante. Los suelos de caliche le infunden un paso por boca algo dulzón y graso.
Temperatura de servicio
Se recomienda servir a 16 ºC.
Consumo
Hasta 2027, aproximadamente, si se conserva en óptimas condiciones.
Maridaje
Carnes rojas a la brasa, secreto ibérico y platos de cocina mediterránea.

Viñedo y elaboración

Nombre
Las Quebradas.
Descripción
Viñedo en vaso situado en el término municipal alicantino de Villena, a una altura de 500 metros sobre el nivel del mar. Viticultura trabajada con concepto "residuo cero".
Suelo
Roca madre, suelos pedregosos (piedra caliche) y pobres en materia orgánica.
Clima
Mediterráneo.
Rendimiento
1.500 cepas por hectárea.
Envejecimiento
Crianza de 16 meses en barricas de roble francés.
Embotellado
En febrero en 2019.

Opinión de los críticos

The Wine Advocate:

I tasted two vintages, 2016 and 2017, two very different years, of their top single-vineyard Monastrell bottlings, including the 2017 Las Quebradas from a vineyard covered in limestone boulders (caliche). This is a pure Monastrell from very poor soils, and it fermented with indigenous yeasts in square oak vats with manual punch-down of the cap. This showcases the power of the elegance, austerity and dry texture of the rocky limestone soils, the warmth of the Mediterranean and an elegant rusticity that makes it very attractive. The decision between this and the Estrecho is more a matter of taste, but the quality level is pretty similar, and very high! I'll give this the edge in 2017. 3,000 bottles were filled in February 2019.