Tesch

Cada año por estas fechas vivimos uno de nuestros rituales favoritos, el desembarco de las nuevas añadas de los emocionantes vinos de este clásico alemán.[break]

La capacidad para reflejar la identidad de cada terruño es una de las razones que hace tan especial a la Riesling. Aquí reside el exitazo de Weingut Tesch: cada parcela cuenta con suelos distintos que ofrecen la posibilidad de tallar perlas con un carácter único, alcanzando un perfecto equilibrio entre la esencia varietal de la uva y el alma de estos parajes de ensueño.

Además de sus privilegiados suelos, este paraíso, donde el tiempo se detiene, lo tiene todo: viñas viejas con la mejor orientación para que las uvas maduren en el frío clima continental y un gran equipo dedicado a mimar cada cepa. Se vendimia a mano, se programan con precisión las labores de la tierra y se vinifica de forma sostenible.

¿Por dónde empezar? Pues si es la primera vez que pruebas sus vinos te animamos a descorchar su riesling de entrada, el T, muy popular en nuestra comunidad y con una relación calidad-precio imbatible. Juntro al resto de etiquetas, viene avalado por las buenas puntuaciones de los críticos de The Wine Advocate y James Suckling. 

Pero si lo que quieres es volar más alto, lo que necesitas son sus tesoros para guardar en tu bodega y vivir una experiencia inolvidable en una o dos décadas: sus St. Remigiusberg y Löhrer Berg prometen una excelente evolución en botella con un gran desarrollo de infinitos matices aromáticos que harán tocar el cielo a los más pacientes. ¡Prost rieslinglovers!