Desde la costa oriental del país oceánico llegan dos vinos estupendos que debes conocer. Para facilitarte la tarea, ahora los tienes con un 20% de descuento.[break]
Se trata de dos blancos de la zona de Gisborne, en plena Isla Norte, que son puro clasicismo del Nuevo Mundo del vino con una Chenin blanc y una Chardonnay que estamos en condiciones de asegurar que te van a encantar por su frescura derivada de su cercanía al océano Pacífico.
Los dos vinos de la venta son muy especiales, e inclusive el chenin blanc fue catalogado en 2008 por Neil Beckett, editor de la revista The World of Fine Wine, como uno de los 1001 vinos para beber antes de morir. Nace en viñedos aledaños al río Te Arai que provoca que las cepas se encuentren buena parte del día sumidas en una neblina que termina por provocar la podredumbre noble que le otorga su sello personal: un dulzor sutil y muy elegante.
El chardonnay tiene su origen en un único viñedo, Clos de Ste. Anne, plantado en una ladera muy inclinada. Ahora está perfecto para beber, pero si quieres guardarlo unos años, va a ganar, y mucho, en su evolución. Te van a enamorar su aroma a vainilla y su frescura en el paladar. James y Annie Millton son los propietarios de la bodega establecida en el lugar en el que se plantaron las primeras vides de Nueva Zelanda a finales del siglo XIX. La pareja lleva casi cuatro décadas elaborando vinos en esta región y son pioneros en las prácticas biodinámicas y ecológicas. Sus vinos merecen mucho la pena. Es el momento para descubrirlos.
James y Annie Millton establecieron su bodega en la ribera del río Te Arai, cerca de Manutuke.
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