Champagne Brimoncourt

La época que va a llegar nos invita a descorchar  espumosos con más asiduidad, por eso te traemos una propuesta desde Champagne que es garantía de éxito. [break]

Su nombre es Brimoncourt y se trata de una bodega con historia, y es que su origen se remonta al año 1875. Sin embargo, desde 2008 está viviendo una segunda juventud, y todo gracias a su actual propietario, Alexandre Cornot, que ha vuelto a poner a esta casa en la órbita de las grandes ‘maisons’ de la zona. 

Aunque se asienta en Reims, la capital por antonomasia de Champagne, los viñedos de Brimoncourt se localizan en el municipio de Aÿ, lo cual es toda una fortaleza para esta bodega que en los últimos tiempos ha despertado el interés de críticos como los de la revista Wine Enthusiast o la mismísima Jancis Robinson, a quien debe algunas de sus mejores puntuaciones. 

El renacer de Brimoncourt tiene dos grandes responsables. Por un lado el propio Alexandre Cornot, que adquirió la ‘maison’ en 2008 y desarrolla desde entonces una filosofía lo más alejada posible de los grandes volúmenes y los crecimientos acelerados. Y por otro, el chef de cave François Huré, un maestro en el arte del ‘assemblage’, que trata de plasmar en todos sus vinos el carácter de una región vinícola de primer nivel mundial.

Nuestro comité de cata tuvo la oportunidad de probar estas creaciones y nos aseguran que todas ellas pasaron el examen con sobresaliente. Aunque puestos a mojarse, nos ponen sobre la pista de dos joyitas: Brimoncourt Blanc de Blancs, un 100% Chardonnay cítrico, mineral y de burbuja muy fina que también ha despertado el entusiasmo de los críticos de la revista francesa Gault & Millau; y Brimoncourt Extra Brut, un espumoso dominado por la Pinot noir que se muestra muy original en cata gracias a su toque herbáceo, con notas de tomillo y orégano. El Rosé tampoco se queda atrás, mostrando una faceta menos desconocida de esta región. 

Sea cual sea tu elección, te encontrarás con unos champagnes ligeros y frescos, ideales para dar la bienvenida a la Navidad poniendo un poco de chispa en tu copa.