Pura Viña

El proyecto comenzó en el año 2016 con la adquisición de la primera parcela de viñedo por parte de tres amigos: Rafael Moreno (enólogo), Juan Francisco Carmona (hostelero) y Santiago González, gran aficionado al vino.

Pura Viña es un pequeño proyecto que en el año 2019 elaboró apenas 10.000 botellas, un gran salto respecto a sus dos primeras añadas de vida, en las que se embotellaron unas 2.000 botellas en cada una.

La filosofía de Pura Viña es la de mantener pequeños volúmenes a partir de un estricto control de la viticultura en el campo y mínimas intervenciones en bodega. Para desarrollar este propósito cuentan con 6 hectáreas de viñedo, todas plantadas con la uva autóctona Monastrell. Estas parcelas se encuentran en los dos mejores valles de la zona.

Uno de los valles es el más fresco de la comarca y está situado a 900 metros de altitud. Se trata de un valle que crece perpendicular a la salida del sol, por lo que tiene menos horas de insolación. Aquí se encuentran las parcelas más frescas y las que aportan uvas con menor carga de alcohol.

El otro valle es diferente. Se encuentra situado a 100 metros menos de altitud que el anterior. Es un valle más abierto y que crece hacia la recogida del sol, es decir, hasta el oeste, por lo que tiene mayor insolación y entrega uvas con más cuerpo, fruta y carga alcohólica. Con ellos se elaboran vinos más cálidos pero con la misma acidez.

Como curiosidad, Pura Viña está actualmente experimentando con una nueva parcela de Garnacha en otro valle con la que pretenden elaborar algún nuevo vino próximamente que se sume a su interesante porfolio.