Descripción

Complejo, intenso y afilado. El tiempo y la bodega han convertido este Amontillado Viejísimo en un vino de pañuelo, en un perfume del jerez. Posgusto de ensueño donde conviven las sensaciones balsámicas y torrefactas, con recuerdos salados y amargos que hacen de este vino un amontillado de leyenda y escalofrío. En esta edición 2021 han contado además con la inestimable ayuda de Olly Smith, reconocido experto en vinos.

Ficha técnica

La bodega
González Byass
Tipo
Amontillado
Añada
2021
Grado
21.5% vol.
Variedad
100% Palomino fino
Origen
Jerez-Xérès-Sherry

Cata

Vista
Color caoba intenso con reflejos ambarinos, limpio y brillante.
Nariz
Nariz espectacular, complejísima y profunda. Mueble antiguo, cedro, lacas, barnices, ebanistería. Pura concentración donde podemos apreciar su origen de crianza biológica.
Boca
Boca contundente, muy seco, directo, profundo y salvaje. Su final es imponente, rotundo, mostrándonos un perfecto equilibrio entre acidez y vejez, con notas yodadas , salmuera, cacao y caramelo.
Temperatura de servicio
Se recomienda servir entre 10 y 14 ºC.
Maridaje
Mojamas y salazones, quesos muy viejos o el contraste de un cacao puro, son experiencias muy recomendables para acompañar este vino excepcional que te hará meditar.

Viñedo y elaboración

Envejecimiento
52 años de crianza siguiendo el sistema tradicional de criaderas y solera. La selección de una sola bota, la número 3, que envejece en La Constancia Solera Museo.

Opinión de los críticos

James Suckling:

Saca de 2021. Deep mahogany hue. Super intense and rich nose with walnut, sour dough, dried papaya, dried apricot, brown sugar, salted caramel, almond and orange peel. Salty and “painfully” concentrated, yet bright, with a tangy, persistent finish. Endless. The longer you sit with this wine, the more you’d appreciate the beauty of it. Consistently a great Amontillado.

Decanter:

This gem is old and refined, almost decadent, but still subtle. Aromas of crème brûlée, vanilla, treacle, wood polish, honey and toffee apple leap out of the glass! In the mouth, it is texturally complex, an explosion of Churrigueresque complexity, vibrant, rich and almost insultingly persistent. And joyfully old...