Descripción

El hermano pequeño y niño mimado del genio danés Peter Sisseck. Potente, expresivo y muy fresco. La deliciosa carga frutal de moras y arándanos crea un armonioso conjunto junto a las notas especiadas, florales y ligeramente ahumadas. Un espectáculo en cada trago en formato de 1,5 litros

 

Ficha técnica

La bodega
Tipo
Tinto
Añada
2019
Grado
14.3% vol.
Variedad
90% Tinto fino, 10% Garnacha
Origen
Ribera del Duero

Maridaje

Rabo de toro estofado

Sabor, textura y tradición que se llevan de miedo con el carácter carnoso y el volumen del pequeño de la familia Pingus.

Cata

Vista
Color cereza intenso.
Nariz
Aromas de moras rojas y arándanos junto a apuntes florales de lavanda y sutiles notas ahumadas.
Boca
Sabrosa y fresca con un potente carácter afrutado con recuerdos de violetas y especias (clavo). Tiene un posgusto largo y ligeramente cremoso.
Temperatura de servicio
Se recomienda servir a 16 ºC.
Consumo
Hasta 2030 en óptimas condiciones de conservación.
Maridaje
Carnes roja, especialmente de caza. Platos de verduras asadas, arroces con costilla y quesos curados.

Viñedo y elaboración

Descripción
Proviene de 700 microparcelas dispersas de grandes zonas de la Ribera del Duero conducidas por viticultores asociados al proyecto y situadas a una altura de entre 800 y 900 metros.
Edad
Más de 30 años.
Clima
Continental.
Cosecha
Vendimia manual.
Vinificación
La fermentación alcohólica se lleva a cabo en grandes depósitos de cemento, seguido de una fermentación maloláctica y una crianza en estos mismos depósitos.
Envejecimiento
Además de los depósitos de cemento mencionados, una parte de PSI hizo su crianza durante 18 meses jugando con un ensamblaje de barricas francesas usadas donde envejecieran, anteriormente, otros dos vinos de la bodega: Pingus y Flor de Pingus. Estos meses de crianza le permitieron afinar la madurez de sus taninos, concentrar su potencia frutal y definir su noble personalidad.
Embotellado
En julio de 2021.

Opinión de los críticos

The Wine Advocate:

The 2019 PSI combines their knowledge of the vineyards and their new winery. They learned a lot in 2018, a more heterogeneous vintage, and their sorting machine for grapes had to work a lot. 2019 was more homogeneous, an easier harvest when most people made better wine. In the winery, they invested in a simple building but top technology. They used some 10% Garnacha in the blend, which was done one year after aging the lots separately. It really reminds me of the young wines from Ribera del Duero from the early 1990s, with some aromas of orange peel, earthy and smoky (very mild) and with fine-grained tannins. It has good ripeness at 14% alcohol and integrated acidity but great balance. It showcases the style of the 2019s here, fresher than expected and still a sunny vintage, when 2018 was more crystalline. A triumph over the natural conditions of the year. They finally bottled the expected 345,000 bottles. It was bottled in July 2021.

James Suckling:

Blackberry and black-cherry aromas with lavender, cedar and hints of cloves and white pepper, following through to a medium body with ultra-fine tannins and a beautiful, creamy finish. A little tight and reserved now. Another impressive PSI. Give it until 2022.