Descripción

Está considerado el vino estrella de la bodega, y en este 2015 es fruto de una añada considerada como excepcional por la concentración, equilibrio y sanidad de las uvas recogidas. En su elaboración intervienen hasta 5 variedades diferentes: Cabernet sauvignon, Petit verdot, Merlot, Malbec y Syrah, con un predominio de la última respecto al resto. Un tinto con garra y con un tanino maduro que deja un grato recuerdo.

Ficha técnica

La bodega
Tipo
Tinto Crianza
Añada
2015
Grado
14.5% vol.
Producción
92.520 botellas y 978 magnums
Variedad
40% Syrah, 26% Cabernet sauvignon, 20% Merlot, 7% Petit verdot, 7% Malbec
Origen
Campo de la Guardia

Cata

Vista
Color rojo picota, vivo y luminoso.
Nariz
Aroma de alta intensidad, muy bien formado y definido. Primero aparece fruta negra, hinojo y regaliz, luego recuerdos de mantecado y madera quemada.
Boca
Se hace grande en boca. Fresco y muy frutal. Se mueve despacio por la boca, marcando sabor, dando placer. Sensación rugosa al final, que lo hace largo y augura una gran botella.
Temperatura de servicio
16ºC.
Consumo
Óptimo hasta 2023 aproximadamente si se conserva en buena condiciones. Para apreciar todas sus cualidades se recomienda decantar 20 minutos antes de su consumo y guardar en un lugar sin vibraciones y a temperatura estable de entre 15 y 20ºC.
Maridaje
Ideal con todo tipo de carnes, incluso caza y con quesos fuertes como el manchego.

Viñedo y elaboración

Clima
Añada corta en cantidad pero de muy buena calidad debido al pequeño tamaño de la baya derivado de la escasa pluviometría y de las altas temperaturas en determinados tramos del verano. El resultado de esta añada excepcional fue la obtención de uvas muy concentradas, sanas y equilibradas.
Vinificación
Cada variedad se vinifica por separado mediante fermentación espontánea con levaduras indígenas y se ensamblan a mitad de la crianza.
Envejecimiento
Ha permanecido durante 10 meses en barricas de roble francés.
Embotellado
Este vino no ha sido sometido a duros tratamientos de estabilización y filtrado, por lo que con el tiempo puede aparecer un pequeño sedimento natural que no altera la calidad del vino.