Descripción

La fermentación en barrica, que en José Pariente es un proceso cuidado hasta el extremo, permite lograr un vino de extraordinarios matices con un elegante equilibrio entre fruta y madera. El resultado es un blanco profundo, untuoso y complejo en esta añada 2015.

Ficha técnica

La bodega
Bodegas José Pariente
Tipo
Blanco Fermentado en Barrica
Añada
2015
Grado
13.5% vol.
Variedad
100% Verdejo
Otros formatos disponibles:
Origen
Rueda

Cata

Vista
Brillante y de un amarillo dorado a la vista.
Nariz
Posee una nariz intensa, compleja, con aromas especiados, fruta madura, ahumados y un ligero toque de madera. Se aprecian también algunas notas de frutas exóticas y minerales.
Boca
En boca es voluminoso, untuoso y muy elegante. Potente, con una muy buena acidez que le asegura un paso largo y vivo. Presenta un gran equilibrio entre fruta y madera. Todo lo que se percibe en nariz reaparece en la boca.
Temperatura de servicio
Entre 6 y 8ºC.
Consumo
Consumo óptimo recomendado hasta 2020 siempre y cuando se guarde en óptimas condiciones.
Maridaje
Aperitivos, pescados con salsas, mariscos de sabor intenso (centollo, percebes, etc.) y carnes suaves. Presenta un maridaje especial con el jamón ibérico y el foie.

Viñedo y elaboración

Descripción
Las uvas proceden de viñedos viejos ubicados en la altiplanicie del Río Duero, en la zona más alta de la meseta norte de España.
Suelo
Están asentados sobre plataformas de cantos rodados de cuarcita. Terreno pedregoso de origen aluvial.
Clima
Clima continental extremo, ventoso y de influencia atlántica.
Rendimiento
Formadas en vaso tradicional, las cepas tienen un rendimiento aproximado de 4000 kilogramos por hectárea.
Cosecha
La vendimia es manual y se lleva a cabo empleando cajas de 20 kilogramos, lo que permite realizar una primera selección de la uva en el campo y después en bodega.
Vinificación
La fermentación se desarrolló en barricas de roble francés, nuevas y de un año de antigüedad, procedentes de varias tonelerías. Posteriormente se realizó un trabajo de "batonnage" durante 6 meses aproximadamente, con el vino en permanente contacto con sus lías. Posteriormente se trasegó a depósitos de acero inoxidable, en los que permaneció 5 meses más.
Embotellado
Se embotelló tras los procesos de clarificación y estabilización.