Anna de Codorníu Blanc de Blancs Reserva
La esencia de Anna se enriquece con una crianza en cavas de 15 meses que convierte a este espumoso Reserva en la compañía perfecta de nuestra gastronomía, pues puede acompañar de principio a fin todo un menú, desde los entrantes hasta los postres. Cremoso, amplio y persistente, con notas cítricas y de fruta tropical junto a toques propios de la crianza como los aromas tostados componen sus grandes cualidades organolépticas.
Sorprendente. Muy bueno para su precio. Burbuja constante y muy fina. Afrutado y elegante.