Descripción

El amontillado es un vino que se elabora inicialmente con una crianza biológica bajo velo de flor seguida de una fase oxidativa. Esta combinación hace de cualquier amontillado un vino muy singular, cuya identidad está marcada por la crianza biológica. El de Bodegas Tradición tiene una vejez media de 32 años y es el resultado de la combinación de soleras procedentes de Jerez, El Puerto de Santa María y Sanlúcar de Barrameda, de ahí su carácter único.

Ficha técnica

La bodega
Tipo
Amontillado
Grado
19.5% vol.
Variedad
100% Palomino fino
Origen
Jerez-Xérès-Sherry

Cata

Vista
De color ámbar con ribetes yodados.
Nariz
Notas de acetaldehídos, muy punzante, de aromas marinos con recuerdos a lonja, salazones y ahumados. También hay notas de nueces y almendras negras.
Boca
Extraordinariamente seco, de notable salinidad que hace de él un vino largo y complejo, de una sequedad y acidez notorias y que incita a degustarlo con una variedad amplia de productos.
Temperatura de servicio
Entre 12 y 14 ºC.
Consumo
Una vez abierta la botella puede durar en perfecto estado hasta 12 meses, siempre en posición vertical y a temperatura de bodega (unos 16 ºC).
Maridaje
Necesita platos de contrastes fuertes como los encurtidos, los salazones, el caviar, arenques y, por supuesto, platos dominados por el vinagre como los escabeches. También con alcachofas o espárragos.

Viñedo y elaboración

Suelo
Albariza
Clima
Atlántico
Vinificación
Se elabora como fino bajo velo de flor y posteriormente sin él.
Envejecimiento
Crianza media de 32 años en botas de roble americano muy envinadas siguiendo el sistema tradicional jerezano de soleras.
Embotellado
Se embotella en series limitadas.

Opinión de los críticos

The Wine Advocate:

The NV Tradicion Amontillado VORS, certainly has the more complex and subtle nose of all these VORS and is on average 45 years old. It has a very clean nose, with elegance and complexity, powerful but subtle notes of hazelnuts, honey and even some dates. The medium-bodied palate shows a sharp wine with strong salinity, it has the power and the lightness, in a very difficult combination.

Decanter:

This 30-year-old Amontillado is certainly the most concentrated and prodigiously scented wine in our Best In Show collection this year, and if you do procure a bottle, it might be best to anticipate tasting it in thimble-like quantities, albeit in the best glasses you can lay your hands on. Even a thimbleful would be an experience. The colour is light walnut, and among the many notes you might find in the aromas are dried apricots and figs, pounded walnuts, linseed, orange zests, saffron and cardamom, as well as hessian and olive oil. The palate is almost painful by dint of its concentration, and it wouldn’t be hard to find another handful of two of allusions here. It’s weighty, too; profound bitter notes play a role in its profile; it seems saline; and on the palate there’s an acidity which surprises, given that the wine in your glass began life as a low-acid Palomino. Can you taste the ghost of flor, too? We felt you can, hidden in the distinctive lick of yeasty umami loitering in the aftertaste.