Tr3smano

El proyecto de Fernando Remírez de Ganuza y Pedro Aibar en Ribera del Duero se llama Tr3smano. Dos pesos pesados del vino haciendo lo que realmente les gusta. [break] 

“La base del mundo del vino es la paciencia y a veces la inteligencia. Ser paciente para tener el conocimiento sobre lo que tienes que hacer”.

La frase es de Fernando Remírez de Ganuza. Toda una institución en Rioja y el hombre que, tras una providencial conversación en una gasolinera - habrá que leer la entrevista para tener más detalle - se embarcó en una nueva aventura vinícola junto al enólogo Pedro Aibar en un pueblo de la milla de oro ribereña.

Dos hombres con más de 70 vendimias a sus espaldas que han encontrado en Padilla de Duero una ilusión que les está rentando y mucho, porque tienen ya todo el vino vendido en el caso de su Tr3smano TM 2016. El mejor vino que son capaces de hacer y siempre de dos viñedos muy concretos. 

Y pensar que se unieron al proyecto por el puro placer de hacer el vino que les gusta. Que no es otro que un tinto que busca el equilibrio entre la fruta madura de la Ribera y la expresión de la frescura que tanto se demanda hoy en día. Todo ello contando con una Tempranillo o Tinta del País de viñedos viejos, en vaso, en los pueblos de Olmedillo, La Horra, Aranda de Duero y Moradillo.

En definitiva, una búsqueda de frescura pero sobre todo de elegancia. La elegancia que irremediablemente tiende a tener el proyecto ribereño de dos grandes figuras como son Fernando y Pedro.