Un Remírez de Ganuza no es cualquier vino. Tener la oportunidad de comprarlo al mejor precio del mercado es para no pensarlo. Encima es actualmente uno de los riojas mejor valorados por nuestra comunidad. [break]
Pero no solo el Reserva es favorito. Con cualquiera de los vinos que hoy presentamos quedaremos más que bien en nuestras cenas navideñas. Un homenaje merecido que hay que darse al menos en una ocasión como esta.
Hace un par de años lanzaba al mercado Fernando Remírez de Ganuza su Blanco Reserva 2010. Un vino que es seda de la buena. Con una textura en boca que tiene algo de etérea y mucho de inolvidable. Un vino que como diría nuestro sumiller Adolfo, no solo tiene hechuras de grande: es "muy muy grande". Solo hay que tener la oportunidad de ver el viñedo El Olagar para constatar que de un sitio tan especial, llevado por la gente correcta, solo pueden salir cosas así de impresionantes.
Pero volviendo al tinto y entrando en la materia, el Reserva 2010 se posicionacomo un tinto infalible. Se puede discrepar en muchos temas y tópicos pero a la hora de la verdad este tinto ha puesto a todo el mundo de acuerdo. Es una de las mejores añadas en la zona con diferencia y además cuenta con la bendición de unos merecidos 95 puntos Parker. Aunque se puede acudir al asequible Fincas o al inolvidable Trasnocho, resulta imperativo hacerse con su Reserva 2010 porque pasará a la historia.
Dicho esto, debéis saber que últimamente las producciones escasean. Sabíamos que el vino es finito y escaso, pero ahora más que nunca es una máxima a tener en cuenta. Especialmente cuando se trata de vinos de la categoría de Remírez de Ganuza. Definitivamente hay trenes que solo pasan una vez en la vida, no dejéis de subiros a este.
Fernando Remírez de Ganuza fue navarro de nacimiento y alavés de adopción, pero por encima de todo fue un ejemplo de compromiso y sensatez en el mundo vinícola.