Si concebías las mencías como robustas y corpulentas, perfilarás tu idea con estas otras versiones que te presentamos de esta uva típica del Bierzo. [break]
A los ya conocidos Pittacum y Pittacum Aurea, sumamos dos descubrimientos: el vino de villa Pittacum Val de la Loba y el tinto de producción limitada La Prohibición. Ambos seducen a nuevos aficionados en busca de diferenciación en una región puntera.
De todos los vinos que elabora la bodega, su director técnico, Alfredo Marqués, nos cuenta que se siente especialmente orgulloso de ver cómo cada año salen al mercado 150.000 nuevas botellas de Pittacum. Se trata de un vino carnoso y estructurado, un ensamblaje de vinificaciones por separado de mencías de distintas zonas en el cordón montañoso del Bierzo. Del equilibrio entre todas ellas, la bodega ha hecho su buque insignia.
"En cambio, trabajar con las mejores vides siempre es más fácil", cuenta el enólogo en referencia a Pittacum Aurea. Este vino se elabora a partir de cepas centenarias ubicadas en las laderas del paraje Fuente de Miel, a unos 650 metros de altitud, en unos suelos franco arcillosos muy profundos, donde se encuentra "la pura esencia de la Mencía", en sus palabras. Es un vino muy concentrado, con una crianza suficiente que lo hace suave en el paladar.
Avanzando en su portfolio, el vino Val de la Loba se muestra aún más suave y ligero que sus hermanos, con menos potencia y más frescura. Ha sido elaborado a partir de mencías que crecen a unos 700 metros de altitud. Tanto de este, como de Pittacum Aurea se elaboran en torno a 20.000 botellas cada año.
Pero de todos los vinos que entrega Pittacum, es La Prohibición el que encandilará a los amantes de rarezas exquisitas. No se elaboran más de 7.000 botellas por añada y tampoco en todas ellas. “Entre 2006 y 2016 ha habido cuatro años que no lo hemos elaborado. Tenemos muy claro el nivel de calidad que buscamos con este vino”, comenta el enólogo.
Dos de sus singularidades es que está elaborado con Garnacha tintorera y ha sido embotellado bajo la indicación de Vino de la Tierra de Castilla y León. Aunque esta uva tiene fama de ser algo rústica, vendimiada sobremadura, vinificada con raspones maduros y tras una crianza en barricas nuevas, se consigue domarla para entregar un vino redondo.
Viñedos y Bodegas Pittacum inició su trayectoria en 1999 en Arganza del Bierzo, una localidad de gran tradición vitivinícola inmersa en un paraje natural de la región berciana.
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