Este proyecto es la historia de un sueño cumplido, de una promesa hecha realidad en forma de vino. Ya sabemos que en Rías Baixas se elaboran extraordinarios blancos, pero la familia Méndez ha ido un paso más allá. [break]
Además, en la última revisión hecha por Luis Gutiérrez de los vinos de la D.O. gallega, ha otorgado una auténtica lluvia de puntos Parker a todo lo que traemos en esta Venta Privada. Si a esto le sumamos el gran descuento y las pocas unidades que existen, ¡qué más queremos pedir!
D. Francisco Méndez fue el impulsor de la denominación que hoy es conocida en todo el mundo, pero el padre y abuelo de los actuales propietarios, José Manuel y Rodrigo, tenía la esperanza de dar vida a sus viñas de uvas tintas autóctonas plantadas hace décadas.
Para ello, los Méndez contactaron con el ‘winemaker’ Raúl Pérez para asesorarlos en esta materia y conseguir lo imposible si echamos la vista atrás en el tiempo.
El camino lógico habría sido el de cultivar y elaborar variedades blancas, la Albariño en especial, con la que hacer creaciones sublimes, cosa que han conseguido con creces como demuestra el Leirana Genoveva 2018 con sus 96+ Parker.
Tras varios años, el esfuerzo y la perseverancia tuvo sus resultados, con la vinificación a partir de las mágicas Caíño, Loureiro o Espadeiro de referencias redondas y personales que tienen el objetivo de expresar la esencia de su tierra y su variedad.
Por desgracia, D. Francisco no ha podido ser testigo de este éxito, pero su sueño ha servido de inspiración para poner en el mapa mundial a los tintos de Rías Baixas.