La apelación del Beaujolais va mucho más allá de la conocida fiesta del Beaujolais Nouveau que tiene lugar cada noviembre. En ella se esconden joyas de gran clase como las que elabora la familia Bererd. [break]
Estamos ante un tesoro escondido en esta zona a veces olvidada y que cuenta con vinos de enorme relación calidad-precio entre los que destacan sus tintos elaborados a base de Gamay, la reina de la región. Para ir abriendo boca mencionar a Le Perréon, un vino de ‘village’ vibrante con 92 Parker que puedes conseguir por 8,50€.
Ubicado a mitad de camino entre la Borgoña (al norte) y el Ródano (al sur), Beaujolais nos da una magnífica combinación entre fluidez, acidez, baja graduación alcohólica y fruta roja fresca; factores a los que se les debe añadir un precio mucho más accesible que el de sus vecinos norteños y sureños.
Además, las creaciones de Domaine de la Madone albergan una primorosa complejidad que los convierten en pequeñas bombas de placer con las que merece la pena pararse a disfrutar.
También imprescindibles son el untuoso y fragante chardonnay Beaujolais-Villages Blanc y la cuvée Jean Baptiste Bererd, un tinto con 93 Parker pleno de aromas a fruta roja y sutiles especias, taninos finos y un agradable toque final salino. ¿Quién dice que los lujos no son, a veces, accesibles?
Jean Bererd et Fils es el nombre oficial de la bodega que gestiona el proyecto Domaine de la Madone. Se trata de una bodega familiar ubicada en el corazón del Beaujolais con una larga historia detrás.