Diez-Caballero

Diez-Caballero es una de esas bodegas que no necesita tener un gran nombre detrás para posicionar sus vinos entre los más vendidos de su región, y no hablamos de cualquier zona. [break]

Rioja es sinónimo de prestigiosas bodegas, de etiquetas míticas y de vinos que están en el olimpo de nuestro particular universo 'winelover'. Pero también es tierra de descubrimientos, de joyas ocultas que cuando las das a conocer, todo el mundo quiere hacerles un hueco en su casa. Y ese es el caso de los vinos que nos ocupan.

Diez-Caballero es una bodega familiar de Elciego que firma unos vinos ya refrendados en el pasado por nuestros socios. Muchos los conoceréis de anteriores Ventas Privadas, y para otros quizás esta sea vuestra primera vez. No importa, nunca es tarde para hallar vinos consistentes, fiables y honestos; elaborados sin demasiadas pretensiones ni artificios.

Es difícil que encontréis en una gran denominación vinos con mejor relación calidad-puntos-precio que los de esta familia. No es normal que todo encaje tan fácil, pero cuando esto ocurre, suele ser sinónimo de éxito, como sucede con su Crianza 2017, un formidable fondo de armario para el día o día; o su Reserva 2011, un vino de esos que en una cata a ciegas podría rivalizar con cualquier etiqueta de mayor renombre.

Otra de las cosas buenas de Diez-Caballero es que no necesitas gastarte mucho más si quieres conocer vinos más allá de sus genéricos Crianza y Reserva. Su Victoria Diez-Caballero, cuyo nombre rinde homenaje a la matriarca de la casa, es otro regalo para los sentidos con un precio que cuesta creerse. Y lo mismo ocurre con su Vendimia Seleccionada 2016, un 92 Parker ante el que Luis Gutiérrez cayó rendido. Ya lo saben, si quieren riojas de esos para todos los días con los que no van a fallar, han llegado al lugar adecuado. Diez-Caballero es su paraíso.