Uno de los regresos más esperados por nuestros socios se acaba de hacer realidad: Comenge is back, y lo hace a lo grande. [break]
Tienes a tu disposición todos sus vinos de entrada de gama a un precio extraordinario que servirá de impulso para que te lances a por todos ellos y disfrutes de unos momentos de redondez, frescura y buen ritmo descorchador que te harán sentir muy bien.
En el equipo de Bodeboca hemos disfrutado mucho catándolos y nos ha sorprendido gratamente su facilidad de trago y lo bien que están hechos. Se beben solos. Su calidad, afabilidad y buen precio se ven unidos a unas buenas puntuaciones Peñín para todos los vinos de esta venta.
Otro punto importante a tener en cuenta es la presencia de un clarete típico castellano que busca regresar al pasado vinícola de la Ribera del Duero cuando se juntaban uvas blancas y tintas para elaborar vinos. Carmen by Comenge esun vino con una imagen moderna y desenfadada que está muy bueno. Habrá que correr a por él porque tiene muy poca producción y se agotará rapidamente.
Comenge siempre ha ido a contracorriente. Desde sus inicios en 1999 han sido los “raros de la zona” ya que fueron pioneros en la manera de plantar (usando más plantas por hectárea) para crear más competencia. También destacaron por la gestión del viñedo en ecológico cuando eso no lo hacía casi nadie hace 20 años. La doble selección de uvas, una a una, no es una invención suya pero fueron de los primeros en hacerlo para toda la producción.
La vocación innovadora de la bodega vallisoletana es clara, como certifica el hecho de que hayan creado un sistema de fermentación propia patentado en colaboración con la Universidad Politécnica de Madrid, además de otra patente para obtener lías limpias y puras. En esta bodega se aplica la máxima de que las cosas pueden hacerse de otra manera cuando la máxima calidad es el fin último.
El fundador de la bodega, Jaime Comenge, la fundó para, una vez jubilado, tener una distracción y emular los consejos de su padre, el mítico Don Miguel Comenge, autor de uno de los tratados de viticultura más importantes de nuestro país. Esta distracción ha quedado en una misión, la de ofrecer vinos elegantes, con la potencia controlada y menos carácter maderizado, para mostrar un carácter fino, suave y domado. Quería elaborar vinos con un precio justo y lo ha conseguido con creces, ya que seguramente sus vinos sean de los que mejor relación calidad-precio tienen en Ribera del Duero.
Don Jaime señala que la bodega lo tiene ocupado a tiempo completo: “nunca he trabajado tanto desde que me jubilé”. Esto deja clarísimo que desea que Bodegas Comenge sea su gran obra para la posteridad. Qué suerte hemos tenido de que no le diera por jugar a la petanca.
En el Valle del Cuco, entre pequeños arroyos, viñas y castillos, se encuentra Curiel de Duero. Allí se ubica Bodegas Comenge, un edificio de líneas sencillas y arquitectura de vanguardia al servicio del vino.