Bryan MacRobert Wines

El 'winemaker' sudafricano más español que conocemos, Bryan MacRobert, nos lleva hasta sus orígenes de la mano de una colección de vinos del Nuevo Mundo que son un auténtico bombazo. [break]

Antes de contaros mejor el proyecto que este joven elaborador aficando en La Rioja lleva a cabo en su país natal, os pondremos los dientes largos. Su blanco Bryan MacRobert Wines Steen 2015, que nos flipó en cata, cuenta con 90 puntos Parker y un precio de solo 9,90€; y su tinto Field Blend 2014 supera la apuesta: mismo precio pero 93 puntos Parker. ¡Es el momento de dar una oportunidad a los vinos de este lado del planeta!

A Bryan, al que muchos conoceréis por su proyecto riojano Laventura Wines, le hacía especial ilusión darnos a conocer los vinos que mejor representan sus raíces. Por eso, hace unos días vino a nuestra oficina y nos deleitó con una cata protagonizada por los tres vinos que podéis encontrar en esta Venta Privada: el maravilloso vino blanco Steen, un monovarietal de Chenin blanc que representa el nuevo estilo de los blancos sudafricanos elaborados con esta variedad; y los tintos Field Blend y Pinotage, una muestra de cómo se comportan diferentes variedades al terruño de Swartland.

Para los que no lo conozcan, Swartland es una región situada a muy pocos kilómetros de Ciudad del Cabo que constituye una de las zonas vinícolas sudafricanas más interesantes en la actualidad. En los últimos años, jóvenes elaboradores como Bryan están experimentando allí en busca de un perfil de vinos menos alcohólicos, con menos extracción y concentración. Son vinos que buscan la vertiente fresca que en España muchas veces encontramos en vinos de Galicia o las Islas Canarias, por lo que no sería raro que alguno de ellos os recordara a este estilo de vinos atlánticos.

No es nada fácil conseguir esa frescura en una región caracterizada por su clima cálido y seco, sobre todo en verano. Sin embargo, Bryan y su equipo lo llevan haciendo desde 2007 con cepas plantadas siempre en vaso y cultivadas sin irrigación, rompiendo así con los prejuicios que habitualmente desde Europa tenemos con la viticultura del Nuevo Mundo. Y es que todas las viñas con los que trabaja Bryan están además trabajadas de manera orgánica, sin uso de pesticidas, fertilizantes inorgánicos, herbicidas o fungicidas. Un motivo más para aplaudir el esfuerzo de este vigneron al que le agradecemos que nos descubra estos hallazgos que ahora ponemos a vuestro alcance.