Ayer denostada, hoy entre las más apreciadas, la variedad más nuestra vive una nueva edad dorada de la que la bodega aragonesa es artífice clave.[break]
El latido de la versátil y placentera Garnacha resuena con fuerza en Bodegas Borsao, casa puntera de Campo de Borja, uno de sus imperios por excelencia. Acompasa tu copa con él.
El mismísmo Robert Parker dijo una vez que la potencia aromática y frutal de esta uva en tierras mañas no se encontraba en ninguna otra región vinícola del mundo, y buen ejemplo son las creaciones que con ella elabora la casa cuyo origen como cooperativa se remonta a 1958.
Bajo la dirección técnica de José Luis Chueca, primer español en conseguir los 100 Parker con un vino de Garnacha, Borsao conoce el secreto para ofrecer una expresión muy frutal, con gran concentración, que propicia tintos frescos, redondos y fáciles de beber, con taninos presentes pero, a la vez sedosos, y una acidez equilibrada.
Todas sus caras están aquí, la joven y alegre, la más compleja fruto de una esplendorosa madurez ola enriquecida por los matices que le aportan la Tempranillo o la Syrah. Precisamente, esta última fue la elegida para Borsao Zarihs, referencia concebida en colaboración con Chris Ringland, autor de varios syrahs australianos que han alcanzado también el olimpo de The Wine Advocate. Otro acierto más que no debes perderte.
El espíritu aventurero está en el ADN de Borsao, y quizás por ello esta bodega adopta como logotipo un jinete cabalgando Bursao, antiguo nombre por el que se conocía a