Alois Lageder

Su descensdencia heredó su pasión por el vino y comenzaron a elaborar su propias referencias. 

Fue su bisnieto, Alois, quien se interesó por la gran variedad de suelos y microclimas de la zona, el Alto Adige, y en el año 1934 compró el viñedo Löwengang, al sur de la región. 

Además, llegó a un acuerdo con pequeños viticultores de la zona para que le suministraran uvas de la mejor calidad. Cuando Alois falleció, en 1963, su hijo tan solo tenía 12 años, por lo que no podía hacerse cargo del negocio familiar.

Así pues, las mujeres de la familia fueron las que se ocuparon de la bodega y la sacaron adelante. Su mujer Christine y su hija mayor Wendelgard continuaron elaborando vino; el pequeño de la familia, al ser adulto, se sumó a esta aventura junto a su hermana y el marido de esta, enólogo. 

A día de hoy la bodega continúa siendo dirigida por Alois y su hermana Wendelgard, y cuentan con 50 hectáreas de viñedo cultivadas de forma biodinámica.